Una Dirección IP (Protocolo de Internet) es una etiqueta numérica que identifica de manera única a cada dispositivo conectado a una red informática que utiliza el Protocolo de Internet para la comunicación. Es esencialmente la "dirección postal" de tu dispositivo en internet.
Una IP Estática es una dirección IP fija que no cambia con el tiempo. Es asignada manualmente o por un servidor DHCP con una reserva específica, y es útil para servidores, VPNs o dispositivos que necesitan ser accesibles de forma constante. Por otro lado, una IP Dinámica es una dirección IP que cambia periódicamente. Son asignadas automáticamente por un servidor DHCP y son las más comunes para usuarios domésticos, ya que son más fáciles de gestionar y reutilizar.
Las direcciones IP sirven para varias funciones cruciales:
Aunque las IPs son fundamentales, también conllevan ciertos riesgos si no se gestionan adecuadamente:
Es importante usar VPNs para proteger tu privacidad y seguridad en línea, y mantener tu software y router actualizados para mitigar estos riesgos.